Como el mito griego de Prometeo abriendo la “Ánfora de los dioses”: la Caja de Pandora, el fenómeno ovni esconde aspectos ocultos que casi nunca terminan siendo revelados. Permanecen en esa “Caja” sobrenatural, que a diferencia de algunas interpretaciones de la historia griega -que suponen un compendio de males encerrados que la humanidad no debe conocer- la alegoría que empleo de ese recipiente con el tema extraterrestre va, sin duda, por otro lado. El lado extraño, confuso, y a veces controvertido del contacto con seres de otros mundos. No negativo, sino “invisible”.
Resumiré aquí algunas de las preguntas que me han realizado estos últimos años en mis conferencias relativas al fenómeno ovni y el contacto extraterrestre.
1. ¿Los extraterrestres podrían proceder de otras dimensiones y no necesariamente de Orion, las Pléyades o Sirio como se suele sugerir? ¿Podemos hablar de que esos seres provienen de universos paralelos que nacieron del mismo Big Bang?
Series como Fringe y libros de ficción como “Entangled” de Graham Hancock, y otros científicos como Geene y Kaku sugieren la existencia de esos universos paralelos. ¿Qué han dicho los Guías sobre este tema? Hay hipótesis que hablan, inclusive, de que estos seres son proyecciones de un universo paralelo más avanzado dentro de este mismo universo, y por eso nos parecemos mucho a ellos. En realidad, podríamos estar hablando de nosotros mismos pero en un plano más avanzado dentro del mismo origen o Big Bang. Esto fue sugerido por el mismo Michio Kaku.
RG: Desde luego, los seres que nos visitan no necesariamente provienen del mismo plano. En nuestra experiencia de contacto los Guías hablaron desde un principio de la existencia de esas otras dimensiones que hoy en día son materia de discusión en la mecánica cuántica. Pero el asunto es enrevesado. Hay seres fìsicos, que se mueven en naves fisicas y que proceden de otros mundos densos, y, por otra parte, sabemos de entidades no-fìsicas que se desenvuelven en otras membranas de realidad mucho más sutiles. En el caso de los extraterrestres fìsicos, ellos tampoco forman parte de nuestro plano, sino que se estarían moviendo en lo que ellos denominan el “Real Tiempo del Universo”. De acuerdo a esta información, nosotros estaríamos viviendo en una realidad paralela a la “creación original”, aunque esto involucra otras preguntas: ¿Hay una sola creación o tiempo original? ¿De qué tiempo estamos desfasados si hay, supuestamente, distintas dimensiones?
Pienso que los extraterrestres se refieren con ese concepto de “Tiempo Alternativo” para la Tierra como parte de un plan en donde se creó, artificialmente, una realidad paralela, con la intención de que nuestro planeta pudiera sobrevivir luego de haber sido devastado por un impacto de lluvia meteórica. De acuerdo a estos seres, ello habría sucedido hace unos 1.200 millones de años. Como fuese, hay otras interpretaciones por parte de contactados y canalizadores que no hablan de esa intervención alienígena para crear ese tiempo alternativo, sino que estamos en él naturalmente, como parte de los numerosos pliegues del espacio-tiempo que se han venido replicando desde el instante mismo de la creación, un diseño cósmico que reúne distintos “big bangs”, tiempos y dimensiones. Stephen Hawking habla de ello perfectamente en su último libro “The Grand Design”, así que lo que hace décadas se consideraba una locura, propia de la ciencia ficción, hoy es una teoría científica.
Estamos mirando al universo desde una pequeña ventana y no nos imaginamos todo lo que hay en él más allá de los soles y sistemas planetarios.
Y sobre la teoría de que los extraterrestres somos nosotros viniendo del futuro, es perfectamente posible, pero no es el caso de los Guías extraterrestres que nos contactan. Si nos parecemos a ellos es porque hay condiciones de vida semejantes en otras regiones del Cosmos, además de que estos seres visitan la Tierra desde siempre y es posible de que nosotros seamos sus descendientes, aunque esto suene increíble. Si se trata de otro universo “más avanzado” con una vida paralela a la nuestra, la cosa cambia, pues ello entroncaría con la historia de un Tiempo Real superior.
2. Si tenemos un gen de Orión, y somos parte de un experimento para ver si podemos superar a nuestros “creadores”, es de suponer que este plan debe estar siendo controlado, monitoreado y planificado. ¿Hasta que punto lo que nos sugieren los Guías que hagamos para mejorar y evolucionar (como meditar, desarrollar el amor, cambiar nuestra forma de pensar) no es también parte de ese plan original para la modificación genética?
RG: Según lo que nos dijeron los Guías en concretas experiencias de contacto, la vida fue sembrada y teledirigida en la Tierra. Como parte de ese Plan, se procuró instalar en nuestro planeta moléculas auto-replicantes que se sumaran al caldo de vida que estaba germinando en los océanos para que se copie el patrón de lo que ellos trajeron para acelerar la evolución. En ese “paquete” vino el denominado patrón de Orión. Si queremos definirlo de otra manera, un gen extraterrestre que se mezclaría en la humanidad como parte de un programa de observación.
Aquel gen nos impulsa a la tecnología, al territorialismo, colonización y la supervivencia, y puede generar comportamientos violentos. Ya se disponen de varios estudios que sugieren la existencia de ese “gen de la guerra” que tendría origen extraterrestre. Sin duda, la meditación y una disciplina de vida espiritual permitirian modificar esa influencia. Es lo que quieren reaprender los extraterrestres. Pero no somos un “experimento” de ellos, sino parte de un “todo” que también les involucra. Si nosotros evolucionamos y damos el salto, ellos también.
Arriba: superposición de las pirámides de Gizeh con las estrellas del cinturón de Orión. ¿Los antiguos egipcios quisieron señalarnos algo? Esta alineación habría ocurrido hace más de 12,000 años.
3. En ese sentido, el hombre viene cometiendo los mismos errores hace milenios, y hasta ahora no ha podido revertir o manejar su agresividad para disminuir la pobreza o las grandes calamidades de la Tierra. Sólo unos pocos, con mucho esfuerzo y disciplina (Santos, Gurús, Yoguis) han podido “elevarse”, “trascender”. En cambio, miles de millones jamás lo lograrán. ¿Podríamos pensar, hipotéticamente, de que en realidad no se quiere que evolucionemos? ¿Habría un plan mucho más perverso que apunta en sentido contrario?
RG: El plan no es perverso. Hay que pensar que no tendría sentido un seguimiento extraterrestre desde el origen del hombre para terminar en algo oscuro. Ellos también nos necesitan, y requieren la información del salto evolutivo humano para su propio proceso como especie. Lo que ocurre es que solemos concentrarnos en lo malo, y no vemos los cambios positivos que se están dando. Debo aclarar que no se espera que sea toda la humanidad la que alcance ese estado de consciencia, pero sí un grupo grande de personas que concreten una “masa crítica” que termine disparando la evolución de toda la raza humana. Y ello no es creencia new age: está demostrado a través de varios experimentos científicos, desde el célebre caso del mono 100 a los estudios de Hagelin y Sheldrake.
4. ¿Por qué no podemos pensar que los extraterrestres, los que se muestran como amigos, también pueden ser parte del engaño ? Nos piden confiar, tener fe, pero nuestra evolución está en juego. Entonces por qué no podemos tener mayor certeza del mensaje y su presencia? ¿Por que siguen pensando que no estamos preparados para el contacto? La humanidad esta mucho mas proclive a la existencia de ellos. No estoy pensando en el fenomenismo, pero así como hemos avanzado tecnológicamente a pasos agigantados en los últimos 50 años (según los datos, desde la caída en Roswell de una nave), por qué la consciencia humana prácticamente no ha cambiado. Hasta hoy la gran mayoría sigue envuelta en un manto de egoísmo y maldad. Entonces… si somos hijos de un plan genético, es claro que ellos manejan las probabilidades. Haciendo una analogía con la película The Matrix, la realidad que estamos viviendo, ¿es la píldora Roja o la Azul?
RG: Como en la película The Matrix, la realidad que cada uno vive es de acuerdo a la pastilla que se decida tomar. Obviamente, hay de todo en el Universo. Pero muchas veces la confusiones en relación al contacto con seres extraterrestres viene más del testigo que de los seres que presuntamente le contactaron. Las contradicciones y mensajes absurdos suelen ser más cosecha del contactado que del fenómeno en sí. Si bien es cierto el contacto con estos seres involucra temas de naturaleza espiritual, o esotéricos, sería un error gravísimo hipotecar nuestra fe en esas entidades que no son ángeles ni dioses. Son seres que empezaron antes, por ello disponen de mayor experiencia y conocimientos que el hombre. Pero el asunto religioso no debe entrar ni por asomo en la comunicación con ellos. Una cosa es que a veces uno no comprenda ciertas etapas del contacto, y y que se deba esperar para confirmar las cosas, y otra es caminar completamente a ciegas obedeciendo supuestos mensajes extraterrestres.
El contacto es real y hay pruebas suficientes de que ellos están aquí. No se han mostrado oficialmente porque aguardan el momento final en que estemos realmente preparados. Estamos más cerca, pero aún no completamente listos como humanidad. Es verdad que desde Roswell pasaron para nosotros más de 50 años, pero para ellos puede haber sido la semana pasada, pues se manejan con otros criterios al provenir de otra “realidad”, como explicaba hace un momento.
Y la consciencia humana, de acuerdo a mi pensamiento, sí está cambiando. Pero es una revolución silenciosa que aún no se ve en la superficie. Así como hay actos de guerra, hay actos de paz; como hay actos de rencor y venganza, hay actos de amor y perdón. Y no es una postura romántica o idealista: si vemos los acontecimientos mundiales entre líneas, hallaremos que también hay gente comprometida con la vida, el cambio y el futuro. Todo mensaje que apunte a ese crecimiento, genuino, y libre, de ninguna manera puede provenir de un engaño.
5. Entonces, si el amor es el camino ( y esto lo dicen la mayoría de las religiones), ¿por qué precisaríamos que los extraterrestres vengan a recordarlo, y encima a un grupo reducido? El estilo del mensaje y contactismo se asemeja mucho a las estructuras místicas de hace milenios: unos pocos que son contactados, que no tienen pruebas y que construyen un mensaje sobre la base de lo experimentado personalmente. Luego, ese mensaje es llevado a otros y la única prueba es la “Fe”, o cuán creíble es el contactado. ¿Por qué utilizar un sistema de comunicación que es proclive a la burla y desestimación científica? ¿Por qué el proceso de cambio debe ser tan lento? Es decir, ¿sólo ellos son capaces de decidir por nosotros cuándo se tiene que dar un contacto más directo? ¿Porque no colaborar directamente?
RG: Carl Sagan dijo una vez que fue bombardeado por cientos de cartas de presuntos contactados que afirmaban estar en comunicación con seres de otros mundos. Entonces Sagan les envió una lista de preguntas científicas para que los presuntos extraterrestres se la respondieran y aclararan algunos enigmas de la Física. Y ninguna fue respondida. En cambio, cuando Sagan se jugó por enviar preguntas de corte moral, dudas espirituales, sobre Dios o temas místicos, allí sí recibió respuestas, con largas misivas que aleccionaban a la humanidad sobre los cambios que debía hacer. Desde luego, Sagan tomó irónicamente todo esto. Y no le culpo, pues muchos de los mensajes de seres de otros mundos no aportan nada nuevo, o son repetitivos. Ello no quiere decir que todo sea una mentira. Insisto en que el mayor problema proviene del testigo cuando se deja llevar por sus patrones de creencia, fe o educación para escudriñar el fenómeno extraterrestre. Cuando es así (si es que hubo realmente contacto) se termina mezclando todo.
También debo decir que estos seres no sólo se han comunicado de forma mental con testigos comunes y corrientes; ellos han dado pruebas contundentes a astronautas y pilotos de guerra. Como se sabe, muchos científicos y militares se han pronunciado al respecto, denunciando la censura que existe sobre las “evidencias irrefutables” del fenómeno ovni. Toda esa información está disponible y es extremandamente voluminosa y concluyente. A pesar de ello, muchas veces me dicen que si una gran nave se posara sobre el Pentagono en Estados Unidos por muchas horas como para ser filmada, o que estos seres se presentaran en la TV en cadena mundial, se acabaría la discusión. Pero el proceso tiene que ser lento para no generar pánico o reacciones indeseadas de la gente ante un shock de civilizaciones. Ellos no quieren generar eso, aunque nos impaciente la espera.
No es mi intención defender nuestra experiencia, pero muchos de nosotros convocamos a testigos a avistamientos programados y experiencias directas, algunas de ellas con periodistas. Hay fotografías y vídeo de muchas de estas salidas de contacto. Y la información recibida no ha sido solo “espiritual”, sino que también ha aportado datos sobre eventos futuros que se sucedieron con precisión, o detalles ignorados de la historia humana. Estos seres emplean mensajes sencillos y simples, pero aún así, con ese lenguaje, se han referido también a hechos científicos, como la radiación de luz violeta que saldría del centro de la galaxia y que afectaría a nuestro sistema solar (mensajes de hace casi 40 años), situación que ha sido recientemente confirmada al detectar rayos gamma en el núcleo de nuestra Vía Láctea (los rayos gamma tienen un espectro violeta dentro de la escala de radiaciones electromagnéticas, ver abajo recreación de NASA).
Ellos están coloborando, pero no como nosotros quisiéramos.
¿Si se parece su mensaje al de antiguas religiones?
¿Y si los ángeles de antiguo eran ellos? Las religiones se parecerían al mensaje extraterrestre y no al revés…
6. En tu conferencia afirmaste que los Grises han sido exterminados por un virus que la Confederación de Mundos ha introducido en sus colonias. En cambio, hoy se siguen reportando casos de abducciones e implantes en varios lugares del mundo (el programa Coast to Coast de Estados Unidos viene entrevistando a varios investigadores sobre este tema). El tema de los implantes, ¿es real? ¿Sigue vigente? Las abducciones, ¿han parado como dicen algunos? Si nos han dicho que somos parte de una modificación genética, ¿por qué no podemos pensar que las abducciones y los implantes forman parte de este experimento?
RG: En el contacto físico del 24 de febrero de 2001 se me dijo que la Confederación de Mundos había introducido un virus de acción lenta en las colonias de los Grises en la Tierra. Lo hacían de esta forma para no tener que recurrir a una acción militar que pudiese afectarnos a nosotros. Suena a una fantasía, pero lo cierto es que últimamente los reportes de abducciones (y aquí debo decir que muchas de ellas fueron “humanas”, y no extraterrestres) no son tan frecuentes como en décadas anteriores.
También debo mencionar que muchos de los casos que presenta Art Bell en Coast to Coast AM son viejos, no incidentes actuales. Y los “casos actuales”, ¿por qué se reportan casi siempre en Estados Unidos? Hay que tener cuidado con esas noticias…
Las abducciones extraterrestres reales, como las del matrimonio Hill en 1961, probablemente perseguían un estudio de nuestra biología, aunque no aprobado o dirigido por los seres que coordinan el Plan Cósmico en la Tierra. Los intereses de los denominados Grises en esos estudios “medicos” eran variados y sería muy largo de explicar aquí. Lo importante es que ello está ahora controlado.
Arriba: Betty y Barney Hill, los primeros testigos que afirmaron haber vivido una experiencia de abducción extraterrestre (1961).
7. Volviendo al Real Tiempo del Universo, ¿es el cierre de la Cuenta Larga maya, el 21 de diciembre de 2012, el momento exacto en que pasaremos a la cuarta dimensión? Algunas estudiosos afirman que ese evento cósmico sucederá en el año 2019, ya que estamos desfasados siete años del calendario por errores históricos que se cometieron al intentar fechar el nacimiento de Jesús. ¿Qué sabes de ello?
RG: Sin duda alguna, el año 2012 es una fecha clave para el acceso del planeta al Real Tiempo del Universo. Pero muy distinto es afirmar que ese acontecimiento ocurrirá, exactamente, el 21 de diciembre de 2012. Lo he dicho muchas veces: si fuese así, seré el hombre equivocado más feliz de la Tierra. Pero sinceramente creo que el acceso será gradual a partir de esa coordenada. Por ello considero irresponsable poner nuestras expectativas en lo que pueda ocurrir en esa fecha, si pasaremos a la cuarta dimensión, si bajarán los extraterrestres o si ese día empezará un milenio de paz planetario, cuando lo importante es centrarse en el aquí y el ahora. Como fuese, dentro de muy poco veremos que se dijeron muchas cosas incorrectas sobre 2012, al margen de que el cálculo maya sea real.
Ese cálculo se corresponde a nuestro 2012, con errores de calendario y todo lo que se quiera, pues los eclipses y demas eventos astronómicos que señalaron los mayas camino al cierre de la Cuenta Larga, han sucedido con precisión en las fechas marcadas, sin ningún margen de error. Por ello hablar de 2019 es un disparate. Como también lo es decir que 2012 será el “fin del mundo”. Es sencillamente una etapa que se cierra y otra que se abre, y que debe hacer de nosotros humanos más responsables con la vida en el planeta.