Volver al desierto de Atacama genera en mí inenarrables sensaciones. En ese espacio lleno de magia convocamos a periodistas e investigadores del fenómeno ovni para participar de exitosos avistamientos programados. También allí tuvimos encuentros físicos con "ellos". Pero, al margen de las experiencias de contacto, Atacama conmueve más por su historia. Su posible historia "futura"...

Los amigos de Iniciativa Chajnantor me organizaron un nuevo campamento-taller para compartir mis investigaciones y desarrollar una serie de ejercicios de meditación y prácticas destinadas a conectar con el lugar. También me invitaron a conocer los pictogramas de Taira, emplazados entre el río Loa y el salar de Atacama. Son dieciséis paneles de símbolos y figuras a cielo abierto que fueron grabados en los aleros de roca hace casi tres mil años. Seres mitológicos, escenas chamánicas, y hasta inequívocas muestras de polidactilia, enriquecieron mis archivos sobre el misterio de la hermandad de la "Mano Roja".

El autor en Taira.

Unas ciento cuarenta personas de distintos países copamos el espacio del campamento en las cercanías de San Pedro de Atacama el viernes 12 de abril. Elegimos esa fecha por su profundo significado simbólico. Los lectores de Tierra II saben a qué me refiero: El Día Internacional de los Vuelos Espaciales Tripulados...

El grupo durante una charla de González Corpancho en el campamento base.

 

Esa noche, durante nuestras prácticas en el campo, fuimos testigos de dos avistamientos. Objetos que pulsaron con intensidad destellos de gran magnitud, incompatibles con los clásicos flares de satélites. Luego de haber estado inmóviles en el cielo estrellado, los ovnis se desplazaron de forma errática hasta desaparecer.

El sábado 13 llegaron los "mensajes".

A las 20:00 h abandonamos el campamento base para reunirnos en una zona a desierto abierto. Una gran nube se empezó a formar sobre nuestra ubicación. Entonces una comunicación de Ivika me informó que aprovecharían las condiciones climáticas que se estaban dando en la zona para utilizarlas de "camuflaje" y estar más cerca de nosotros y propiciar una experiencia.

La nube que se empezó a formar sobre nuestro campamento.

 

Entonces llevamos a cabo nuestras prácticas y protocolos de contacto y, con la ayuda de "ellos", varios de los asistentes pudieron ser proyectados dentro de la "nube", en donde descubrirán un objeto con forma de dona que parecía estar construido de un cristal traslúcido, casi plasmático, que permitía ver la figura de Ivika y Antarel observándonos y hasta las estrellas en el fondo. Lo extraordinario es que los testimonios coincidían perfectamente en la descripción. Fue una experiencia de proyección remota real. Yo mismo pude "estar" allí...

Foto de Fernando López.

 

Dibujo de J. Reyes.

 

Comparto el mensaje que psicografié en mi cuaderno de campo:

Desierto de Atacama, Chile. 21:30 h

Sí, escribe lo que te voy a transmitir. Soy Ivika.

Los acontecimientos que observan en el mundo constituyen el anticipo de un evento más grande. Pero, pese a la gravedad de esa situación, no se deben distraer. Procuren mantenerse en su centro, en equilibrio.

Como en otras ocasiones, hemos estado atentos a sus pensamientos y conversaciones. No están solos. Recuerden que hay muchas almas actuando con amor en el planeta. Verdaderos agentes silenciosos del cambio, una asistencia que fue acordada desde antiguo para este tiempo. Además, existen diversos grupos-célula asignados para tareas específicas. Saben a qué me refiero. Su número estable es el 490. Son grupos que se activan de acuerdo a los requerimientos mientras otros se hallan en etapa de sueño. En esa cifra hay una clave que comprenderán.

En Pariacaca fluirán los detalles finales para el viaje pendiente a Oriente Medio. Y todo estará conectado con el código de Egipto. Pero tengan presente que este año es solo una transición. Un descubrimiento cósmico en 2025 podría ser la llave que abra paso a la consciencia del lugar que ocupan en el universo, la evolución y aprendizaje de las especies y, también, la extinción. Mas es el conocimiento adquirido el que debe prevalecer. El legado escrito en las estrellas que será “leído” por las criaturas venideras.

Sostengan las reuniones en Atacama y en los otros lugares de contacto señalados. Componentes de las 490 células transitarán (como ya lo han hecho) en estas convocatorias en donde el contexto nos permite asistir con precisas instrucciones. Es todo lo que podemos decirles, por ahora.

Sigan caminando y construyendo una línea de tiempo armónica.

Ivika

 

Sí, Antarel.

Los esperamos en Mount Shasta. En el transcurso de estas tareas se delinearán los momentos que vienen, reordenándose la agenda y su camino a los objetivos. Todo será clarificado.

 

Aunque sabíamos de la existencia de los grupos-célula, la información de la cifra "490" nos dejó profundamente en reflexión. Con mi equipo de trabajo y otros colaboradores internacionales empezamos a estudiar el número desde diferentes perspectivas. Dentro de todo lo que pudimos reunir hasta hoy, nos llamó la atención que 490 encierre el famoso "setenta veces siete" que habría marcado Jesús como un símbolo grandioso de perdón (Mateo 18:22). También encierra la profecía de los 490 años que tendrán como eje, según los eruditos bíblicos, a Jerusalén y la venidera era mesiánica, un vaticinio tomado de la profecía de las Setenta Semanas que figura en el capítulo 9 del libro de Daniel. Una entidad del cielo, el arcángel Gabriel, le reveló al profeta el significado de esa cifra... Por si ello fuera poco, 490 es el valor numérico del hebreo Tamim, cuya gematría significa "Completo", "Perfecto", "Finalizado"...

Dudo que todo esto sea casualidad. Pienso que hay un poderoso mensaje tras la existencia de estos 490 grupos-célula que desarrollan tareas "específicas" en superficie...

El domingo 14 compartimos los mensajes y, como ya adelanté, las "coincidencias" fueron extraordinarias.

Cuando cerramos el evento ese mediodía del domingo, un viento importante empezó a barrer el desierto de Atacama. Como actividad complementaria pensábamos ir al Valle de la Luna. Pero yo no sentía ir. Luego del "cronocontacto" de 2023, quería darme un tiempo para volver a pisar la Gran Duna. Pero la insistencia de gente amiga que llegó desde otros países logró persuadirme. Y el viento es el viento... Las condiciones climáticas obligaron a los guardaparque a cerrar el Valle de la Luna. Se volvía a repetir lo de 2023... Otra "casualidad"... Hasta el aeropuerto de Calama tuvo que reprogramar vuelos ante el evento meteorológico.

Mi vuelo despegó hacia Santiago de Chile, y un número no dejaba de retumbar en mi mente: 490...

 

Otros mensajes recibidos.

Es muy difícil reproducir en este artículo los numerosos mensajes que nos han enviado los participantes del campamento en Atacama. Por su abultado volumen, me veo obligado a compartir un resumen de algunos de ellos, una muestra que pueda transmitir la esencia de lo recibido.

 

Solange Ferrari.

Ivika me muestra, desde arriba, una ciudad antigua.

Y en otra secuencia la imagen de un ciervo.

Luego Antarel me dice:

“Transmite la importancia del trabajo en grupo”.

Entonces me pide que observe su mano con atención:

“Habrá un pacto que salvará vidas”

“La frontera azul se llamará”.

 

Leandro Augurusa.

Lo primero que recuerdo, al iniciar el ascenso, es una voz clara que me decía 

“Leandro, las respuestas que estás buscando, se hallan en tu interior”.

Y luego, ante mi duda y consulta respecto a mis hijos y descendientes futuros, me dijeron:

“No te preocupes por ellos, hay que confiar en el futuro”.

Con relación a las imágenes, visualice desde el exterior una especie de nave, con gran ventanal o similar, que en el interior se veía siempre con un fondo de tonos azules. Allí había una entidad de pie, que no pude distinguir bien su rostro, vestida con un traje metalizado. Y sentado cerca de él o ella, como copiloto, pude ver a mi padre, con una edad estimada de 35/40 años. Él falleció hace casi 10 años…

En resumen luego de estas experiencias, creo que la humanidad mantiene la esperanza de “postergar” el suceso mientras cada uno de nosotros encuentre a Dios en el próximo (en el prójimo).

 

Iván González.

“Vuestra singularidad nos hermana y sintoniza.

Hemos sentido sus emociones correspondidas con pulsos variables y verificables.

Dicha singularidad se basa en la arquitectura de tres ejes:

Individual: Aquel caminante que se auto-descubre y transforma su vida en virtud hacia los demás.

Colectiva / grupos célula: Es la dinámica que integra a grupos en afinidad, y grupos célula consolidados para objetivos que brindaremos en los nodos de poder bajo los propósitos específicos de la investigación de su historia, legado y de las interacciones con nosotros. 

Global (planetaria - cósmica): Es la consciencia factorial de los dos puntos precedentes entorno a las fluctuaciones de la Tierra, los ciclos solares que estudian sus científicos, los efluvios cósmicos y vuestras capacidades de co-creación, redención y mutación a otro estado que nos permite interaccionar más íntimamente con ustedes.

 

Cecilia Yaikin 

Durante la meditación con el hipercubo me elevo y soy absorbida por una forma similar a una flor transparente que me lleva dentro de una nave con forma de donut translúcida. Está hecha  como de una membrana transparente ya que se pueden ver las estrellas y la tierra en 360 grados. Nos veo a todos sentados en círculo. Aunque la nave no se ve tan grande, cabemos todos los que estamos reunidos.

Veo cómo aparece en el centro una flama de luz blanca con destellos azules y naranjas hasta adquirir la forma de una esfera luminosa de aproximadamente 40 centímetros de diámetro. De ella salen hilos de luz hasta el centro del pecho de cada uno de los que estamos sentados y este hilo se prolonga por detrás de nuestra espalda hacia afuera, convirtiéndonos en un telar de luz hacia la Tierra".

En la madrugada me despierto de súbito, pasadas las 4 am, y comienzo a recibir información que completa lo vivido en el desierto:

“Somos semillas de paz sobre la Tierra. Este rol a asumir nos convierte en embajadores de paz en cada lugar donde estemos. Estas semillas estuvieron guardadas, durmiendo, como las semillas en un granero antes de la siembra, esperando para cuando se nos necesitara. Ahora es el momento. Debemos ser semillas, pero semillas activas.

Para ello debemos seguir tres pasos:

1.- Recordar:

Volver a pasar la información por nuestro corazón. 

2.- Sostener:

Mantener la atención en lo que debemos sembrar, estar presentes. 

3.- Sembrar:

Con nuestra intención, a través de la voz, las manos, un gesto, etc. Esto ha de ser una labor diaria, realizada con disciplina y creatividad. No hay límite! 

 

Cristian Elchiver.

En el preciso instante que subo proyectado con el teseracto o hipercubo me dirijo

intuitiva y directamente hacia la nube, guiado por esta sensación fuerte de su presencia en ese lugar. Fue así que al traspasar la nube y al ingresar a ella me doy cuenta que que allí dentro se encontraba una nave muy grande donde veía perfectamente un ventanal largo y ancho de aproximadamente unos 25 a 30 metros de extensión por unos 4 a 6 m de altura. Yo me encontraba levitando por fuera del ventanal o gran visor. Desde este lugar podía observar paneles y otro ser que se encontraba junto a Ivika y Antarel, quienes estaban de frente y muy apegados a este cristal observándonos desde esa altura a todo el grupo que se encontraba en el trabajo guiado por Ricardo González Corpancho.

Antarel me transmite:

“El propósito de tu visita y de nuestra reunión es que puedas y puedan descargar memorias que ya tiene este lugar en un futuro que ya es pasado y que activará la información que trae consigo el agua (información original de construcción y diseño con intención y propósito) para la unificación de los paradigmas de existencia que los impulsará a redescubrir y recordar el propósito de amor trazado y pactado por nosotros y con ustedes para estos tiempos que se acortan y ajustan”.

Vendrán eventos que harán remecer los cimientos de toda religión y dogma. Será el punto de inflexión para poder sintonizar la real sabiduría del ser y su existencia para el posterior cuidado y resguardo de ustedes mismos y de aquellos niños que ya están siendo preparados en otras líneas de tiempo. Incluso algunos ya están siendo preparados por ustedes mismos desde otro punto de percepción del tiempo que se alineará para ajustar. Será el principio de una nueva y renovada humanidad consciente a la que tanto amamos y extrañamos con sabia esperanza”.

 

Gastón Vienne.

“Los tiempos actuales se entrelazan de manera sincrónica, revelando giros que han sido previstos por los mentores. En el desierto de Atacama se inicia un renacimiento que traerá consigo la revelación de la razón por la cual nos encontramos aquí.

Las promesas del pasado comienzan a cumplirse y el giro del tiempo marca el retorno de lo mejor de cada uno. Es posible que se pregunten por qué están presentes en este lugar, pero les digo que la respuesta ya está en su conocimiento, como parte del pacto establecido en otro desierto que los unió en el pasado. Este mismo lugar se convierte ahora en el escenario de una nueva revelación.

Les insto a concentrarse, ya que estamos acompañándolos en este proceso. Las dos tierras se fusionan en una sola, y ustedes son los encargados de unir estas dos realidades, pues son nuestros padres en el pasado y seremos sus hijos en un futuro no tan lejano”. Sampiac.

 

Ana Lía Tarabuso.

La noche del encuentro con la gran nube, la brisa me llevó hacia una gran luz blanca, con la sensación que un reflector nos iluminaba a todos; entonces llegaron a mi mente las siguientes palabras:

Confiar.

Sembrar consciencia.

Sembrar coherencia.

Armonía, paciencia y esperanza.

Ayudar.

Algo me decía que los próximos dos años iban a ser difíciles, pero debíamos confiar y seguir…

 

Yaidarai Claudia Chiarello.

Cuando hicimos la meditación del hipercubo sentí que me elevaba a la nave. En mi mente la visualizaba transparente, como si fuese algo holográfico. Allí me dieron la bienvenida. Entonces hicimos un recorrido para conocer la nave y vi que nos llevaban a un “anfiteatro”. Todos estábamos sentados en filas. Yo estaba estaba ubicada en la última fila y te podía ver conversando con un ser que era muy parecido ,con cuerpo humano como blanco resplandeciente.Te estaba compartiendo información, y también a cada persona allí presente.

Como conclusión, siento que hay que estar, ser parte, porque nos hallamos aquí por algo mayor que nosotros, algo que es por nuestra amada Tierra…

 

"Ivika y Antarel" en el hipercubo. Otro dibujo de Jessica Reyes.